Un precipio de innumerables rostros
muertos
me apunta, con sus ojos de hoguera
clavan mi Alma agonizante
sobre una cruz de brasas eternas.
Es que acaso mi silencio de asfixia
mis manos que han sido cortadas
por el Demonio de la lejanía
la cicatriz mutante que llora
el Maldito que drogó la piedad en mí mismo,
mis venas rotas sobre la locura de haber huido
empapando de melancolía
al halo de mi carne invisible.
Dónde fueron mis soles muertos
dónde moran mis ángeles piadosos
que se revisten de Noche voladora?
domingo, 27 de enero de 2013
martes, 22 de enero de 2013
lunes, 7 de enero de 2013
La Noche es verdugo
que tortura la carne viva
de mi Alma alejada de Mí mismo...
sólo morir en mi mente tormentosa,
liberarme de Ella para seguir volando
entre los luceros apagados que me conducen
a donde ya no puedo saber.
Golpes mudos
entre las aguas que ahogan mis pupilas,
ayer mirando su hoguera inalcanzable
y tan cercano a la ceguera de mis manos,
al ruego sordo
de la maldita indiferencia que me engañó riendo...
que tortura la carne viva
de mi Alma alejada de Mí mismo...
sólo morir en mi mente tormentosa,
liberarme de Ella para seguir volando
entre los luceros apagados que me conducen
a donde ya no puedo saber.
Golpes mudos
entre las aguas que ahogan mis pupilas,
ayer mirando su hoguera inalcanzable
y tan cercano a la ceguera de mis manos,
al ruego sordo
de la maldita indiferencia que me engañó riendo...
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