...y siempre ,
o de vez en cuando que la quietud de tu recuerdo
acaricie suave las orillas de mi sueño,
veré el agua oscura que se vuelva azul
y tu estrella lejana
dibujando balsas de tus besos en mi alma flotando...
Como si clavare un puñal al sol, muerto caiga
el mar se vuelva lava que nos santifique
los cuerpos que arden secretos en la niebla.
y agua bendita se torne vino y embriague a los santos,
Sorprenda tu sombra , nube plomiza o
eclipse de mi locura que logró derrotar el día,
ofrendas a la Santa Luna Roja
sumergida en nuestra pureza condenada de humanos...
Son espíritus que resplandecen y hablan con truenos,
llegan a comulgar conmigo bajo tu tormenta inexpugnable
y rebelada a todo orden de lo Luminoso...
y tú que llegas, tú que vienes a darme de beber,
un grial profano de sangre dulce y piel caliente...
hasta los huesos que humeen eternos .
Y como un lanzallamas que desde el cielo negro
sobrevuela el mundo carbonizando llantos muertos,
me aprisiona y me condena,
alguna vida o copia de mí yace en una cruz
de fuego,
rebalsando mis pulmones de tanta ceniza de nosotros...
nunca saldrá palabra o grito,
el alma agoniza y el gozo cegó sus ventanucos ,
sólo oscuro donde resplandece la añoranza...
si el pasado me absorbiera , únicamente
clavaría mis pies en tu madero,
y que la maza en tus manos
quebrase mis piernas,
y no fugarme .
Tú...