En las calles
los vidrios son diamantes de minas de alcoholes que
calcinan risas,
y los virus son malos vicios que bailan sin piedad
sobre
la carne picada de agujas y uñas.
En la calle la comida se transforma en agua
En la calle la comida se transforma en agua
y el vino en cuadros de
cartón
que decoran la mente de fantasmas y opulencia alucinada,
que decoran la mente de fantasmas y opulencia alucinada,
De visiones y sueños perdidos en las baldosas ,
almas eternas de mil espíritus que sostienen la lotería de la vida...
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