miércoles, 1 de febrero de 2012

Una sola sólo una luz agonizando
en la lejanía de todo naúfrago urbano.
Un parral de estrellas
con gusto a sal amarga
que se ESTRELLA
harto de tanto vuelo ciego al sinfín
del círculo de tierra secada
sedienta del lengüetazo
a un espejo vivo de metal y nostalgia.
Sumergido cabalga en el aire
cual que una hoja de libro a la deriva
de un escrito borroso en su tumba errante.
Leña de espinas y espuma
encendida a través de un añico de mundo,
ha cedido la Noche su tiniebla efímera y eterna…

1 comentario:

Eterna Prisionera dijo...

que sentimiento !!...digno de un genio...sos lo mas!!